Hace un tiempo sentí un dolor muy fuerte en la cabeza y parte de la nuca. Era tan intenso ese dolor que temí fuera un derrame cerebral. Quizás fui exagerada pero no importa, lo que importa es lo que sentí. Tenía miedo a no despertarme al día siguiente, a que acabara todo esa noche, así lo estaba viviendo. En ese momento de miedo, de preocupación, empecé a pensar en mis seres queridos, en esas personas que tanto quiero y que dejaría aquí y empecé a sentir un amor de ellos hacia mi enorme. Un amor tan, tan grande…, que nunca había sentido, ni he vuelto a sentir. Fue algo tan bonito, tan maravilloso que si me hubiera muerto en ese momento me hubiera muerto feliz, me hubiera muerto llenita de amor.
Recuerdo que al día siguiente cuando desperté no paraba de pensar en ello. No sabía porque me había ocurrido, pero lo que sí tenía claro era que no quería olvidar ese sentimiento. Es como que llena todo de amor, es algo precioso que si alguien no lo ha sentido no lo va a entender porque no se puede explicar con palabras, no hay comparación, pero si lo ha sentido seguro reconoce ese sentir.
El otro día, hablando con mis compañeras surgió precisamente ese tema. Hablaron de distintas personas, que en situaciones distintas, habían vivido algo parecido. Todas esas personas en un momento dado tuvieron miedo a morir, por distintas circunstancias, y todas sintieron ese amor infinito, esa paz.
Entonces, si todos teníamos en común el miedo a morir en ese momento, cuando sentimos ese amor enorme, me pregunté: ¿y si cuando mueres sientes eso y si cuando mueres te llevas ese sentimiento de amor tan enorme? bueno no sé si te lo llevas o lo recibes de donde vayamos a ir. ¿Y si eso es morirse?
Si yo sé que al morir voy a sentir eso, que morir es sentir ese amor infinito durante una eternidad, yo pierdo el miedo a morir. No tengo miedo a la muerte porque ese sentimiento vale la pena sentirlo siempre.
Y si fuera eso morir y todo el mundo lo supiera ¿perderíamos el miedo a morir? ¿Qué sentido tendría tener miedo cuando sabemos que lo que nos espera es mejor que lo que ya tenemos?. Y si no tenemos miedo a morir ¿cómo cambiaría eso nuestra vida? porque muchas veces no hacemos ciertas cosas por miedo a morir, a que nos pase algo, al riesgo, a… mil cosas. Pero si no tuviéramos miedo a morir ¿cómo cambiaría nuestra vida? ¿cuántas cosas haríamos que ahora no nos atrevemos a hacer?
Y cuando se muera un ser querido ¿lo sufriríamos igual? nos dolería porque no vamos a volver a ver a esa persona, porque no vamos a poder compartir con ella, pero dejaría de sufrir por su muerte porque sé que a donde va estará mejor que aquí y eso hace que su ausencia no duela tanto.
Me vinieron un montón de preguntas que, por supuesto no tengo respuesta, pero que sí que me hizo plantearme todas estas preguntas. Y mis compañeras y yo, las que sintieron lo mismo, hemos perdido el miedo a morir porque es tan bonito, tan maravilloso, tan grande ese amor que sientes que ¿cómo no vas a querer volverlo a sentir? Aquí, en este mundo, no se siente. Por mucho que yo sienta que me quieren mis seres queridos nunca lo he sentido con esa intensidad, nunca. Y yo cuando quiero, y quiero mucho a mis seres queridos, tampoco lo siento con esa intensidad.
Yo creo que ese amor no está aquí, ese amor tan grande está fuera de aquí y eso es lo que nos espera a todos. Así que yo creo que podemos perder un poquito de miedo a la vida, a la muerte, y nos vamos a quedar mucho más tranquilos cuando nuestros seres queridos se vayan porque sabemos que van a estar bien, muy bien y eso, aunque nos deje tristes porque no los vemos. nos hacen estar muchísimo mejor.
Charo Camino